El Gobierno libanés ha activado este lunes un plan nacional de emergencia para asistir al “número considerable” de personas que se están desplazando en diferentes zonas del país tras los bombardeos masivos de Israel contra el sur y el este, que han matado al menos a 274 personas y herido a más de 1.000. Entre las víctimas hay 21 menores y dos médicos, según el Ministerio de Sanidad libanés. El plan de emergencia contempla la escasez de alimentos y cómo abordar la distribución de los suministros entre la población.
Las autoridades también están coordinando la apertura de escuelas y otros centros para alojar a los ciudadanos. El ejército israelí ha afirmado que los ataques de esta mañana —los más letales desde que se intensificaron los enfrentamientos entre Hezbolá e Israel en octubre— suponen el inicio de una ofensiva aérea a gran escala en Líbano. Las autoridades castrenses han pedido a los residentes del valle de la Becá, en el este de Líbano, que abandonen sus hogares y que se mantengan alejados de los edificios “usados por la milicia para esconder armas”. Dos horas después de este aviso, las fuerzas aéreas israelíes han bombardeado la zona.
El Ministerio de Sanidad libanés ha elevado a 274 el número de muertos y a 1.024 la cantidad de heridos (entre ellos, 21 menores, 31 mujeres y dos médicos) en la operación israelí de este lunes contra Hezbolá, que bombardea varios puntos del país. En entre ellos, el valle de la Beká, que ha sido desalojado con apenas unas horas de antelación. El Gobierno libanés ha activado un plan nacional de emergencia para asistir a los numerosos desplazados.
Se trata de la jornada más mortífera en el país desde que comenzó la guerra en Gaza hace casi un año, según han reconocido fuentes libanesas a Reuters. Estos ataques aéreos han intensificado la presión sobre Hezbolá, que la semana pasada sufrió un ataque con detonaciones a miles de buscas y walkie-talkiesutilizados por sus miembros. El secretario general del grupo, Hassan Nasrallah, calificó el ataque masivo como una operación “sin precedentes en la historia”.
El Ejecutivo está haciendo un “seguimiento de las cifras de personas desplazadas” y también realizando un censo de población para poder proporcionar la respuesta adecuada. “Hay informes iniciales sobre el traslado de un número considerable de desplazados a zonas del Monte Líbano, zonas del valle de la Becá y Beirut”, apunta la nota sin ofrecer cifras.
El Gobierno libanés ha activado un plan nacional de emergencia para asistir al “número considerable” de personas que se están desplazando en diferentes zonas del país tras los bombardeos masivos de Israel contra el sur y el este, que han matado al menos a 182 personas.