La Cooperativa de Transportes Santa Rita suspendió este jueves sus operaciones en Babahoyo, provincia de Los Ríos, a causa de presuntos ataques armados contra sus unidades. Los incidentes, aún sin confirmación oficial, estarían vinculados al cobro de extorsiones, conocidas como «vacunas», por parte de grupos delictivos.
Reportes extraoficiales indican que al menos dos buses habrían sido baleados después de que los transportistas se negaran a ceder a las demandas extorsivas. La medida busca salvaguardar la integridad de conductores y usuarios.
Impacto en la movilidad y alerta en el gremio
La paralización de la Cooperativa Santa Rita ha generado serias complicaciones en la movilidad de los habitantes de Babahoyo, quienes dependen del transporte público para sus traslados diarios. Paradas llenas sin buses en circulación evidencian el impacto directo de esta decisión.
La problemática se extiende a otros sectores del transporte, pues taxistas de la zona también han denunciado ser víctimas de extorsión. Hasta el momento, las autoridades locales o nacionales no han emitido un pronunciamiento oficial sobre estos casos.
El caso de la Cooperativa Santa Rita es un reflejo de la creciente inseguridad y presión delictiva que afecta a varias ciudades del país. Transportistas de Babahoyo denuncian una falta de respuesta institucional ante las amenazas del crimen organizado.
Diversas organizaciones del gremio han solicitado acciones urgentes al Ministerio del Interior, Policía Nacional y la Gobernación de Los Ríos para frenar esta ola de violencia que pone en riesgo a trabajadores y usuarios. Hasta el cierre de esta nota, solo las Líneas 1 y 2 de la Cooperativa Fluminense mantenían operaciones parciales, bajo medidas de precaución.
La ciudadanía exige a las autoridades que no guarden silencio y que implementen estrategias efectivas para frenar la delincuencia organizada que afecta al transporte público y privado en Babahoyo.