La Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) clausuró dos plantas procesadoras de agua purificada envasada en Puerto Bolívar y Machala, provincia de El Oro, debido a incumplimientos graves a la normativa sanitaria que ponían en riesgo la salud de los consumidores.
La primera planta, ubicada en un garaje en la parroquia Puerto Bolívar, fue clausurada después de que técnicos de Arcsa encontraron un conjunto de irregularidades que violaban los estándares de higiene y seguridad alimentaria. Entre los hallazgos se encontraron cucarachas, falta de orden, aseo y limpieza, así como acumulación de sedimentos en los tanques de agua que estaban siendo preparados para ser envasados. Además, el producto no contaba con la Notificación Sanitaria vigente.
La segunda planta, ubicada en la ciudad de Machala, fue clausurada después de que análisis de laboratorio detectaron contaminación microbiológica en el agua envasada, para ser vendida como purificada. Como medida preventiva, Arcsa suspendió la Notificación Sanitaria del establecimiento y clausuró las instalaciones para evitar la comercialización de un producto que podría afectar la salud de los consumidores.
“La clausura de estas plantas es un claro ejemplo del compromiso de Arcsa con la protección de la salud de los consumidores y el cumplimiento de la normativa sanitaria en el país”, afirmó el director de Arcsa, quien agregó que “la agencia seguirá trabajando para garantizar que todos los productos que se comercializan en el mercado cumplan con los estándares de calidad y seguridad requeridos”.
Con estas clausuras, Arcsa evita la comercialización diaria de unos dos mil bidones de agua purificada envasada que no cumplen con los estándares de calidad y seguridad requeridos. La agencia recuerda a la población que puede reportar irregularidades sanitarias a través de la aplicación Arcsa Móvil, disponible gratuitamente en Play Store y Apple Store.