Los cuerpos hallados en Taura se encuentran en avanzado estado de descomposición, lo que dificulta su identificación y aumenta el sufrimiento de las familias.
La angustia y el dolor se profundizan para las familias de los cuatro jóvenes desaparecidos en Taura, luego de que se confirmara que los cuerpos hallados en la morgue se encuentran en un estado que impide su reconocimiento visual.
Los cadáveres, localizados en la parroquia rural de Taura, cantón Naranjal, Guayas, presentan un avanzado estado de descomposición y calcinación, según informaron fuentes del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH). Esta situación ha imposibilitado que los familiares puedan identificar a sus seres queridos de manera inmediata.

Ante la imposibilidad de un reconocimiento visual, las autoridades han iniciado los protocolos para realizar pruebas de ADN, las cuales permitirán confirmar la identidad de los cuerpos. Sin embargo, este proceso puede extenderse por varios días, lo que prolonga la incertidumbre y el sufrimiento de los familiares.