Kroshik, un gato doméstico de 17 kilos, se ha convertido en el centro de atención global tras ser rescatado del sótano de un hospital en Rusia. Apodado ‘Migajas’, este felino está entre los más obesos del mundo, según el Refugio Matroskin, ubicado en la ciudad de Perm, donde fue llevado por voluntarios.
Aunque sus antiguos dueños lo cuidaban con cariño, su dieta basada en pan rallado, sopa y carne lo llevó a un sobrepeso extremo. Como resultado, Kroshik no puede moverse ni caminar debido a su condición. Los veterinarios explicaron que su capa de grasa ha dificultado los exámenes médicos, al punto de que no se pudieron realizar ecografías inicialmente.
Para recuperar su salud, Kroshik ha sido inscrito en un programa de dieta y ejercicio con el objetivo de reducir su peso a entre 5 y 7 kilos. Su rehabilitación incluye sesiones de ejercicio en una cinta, pero el proceso es costoso. Hasta el momento, el refugio acumula una deuda de 100 dólares por los exámenes médicos y los gastos futuros ascienden a unos 330 dólares.