La muerte de una ecuatoriana ha causado alarma en la capital italiana, Roma. La mujer falleció el domingo pasado tras sufrir complicaciones durante una operación de liposucción en un centro médico privado de la ciudad.
Un médico, un anestesista y una enfermera están siendo investigados por su presunta responsabilidad en la muerte de la paciente. La Fiscalía de Roma ha abierto una causa contra los tres profesionales sanitarios, quienes son sospechosos de un delito de homicidio involuntario, según confirmó este martes la policía.
La víctima murió el domingo en el servicio de urgencias del hospital Policlínico Umberto I de Roma, al que fue trasladada en estado crítico en una ambulancia privada, horas después de la intervención.
El médico peruano Jose Lizarraga Picciotti, referente de las mujeres de la comunidad sudamericana en Roma, está siendo investigado por la justicia italiana por la muerte de la ecuatoriana.
A la espera de la autopsia que se llevará a cabo mañana, miércoles, la Fiscalía de Roma ha abierto una investigación al médico, al anestesista y a la enfermera presentes en la operación por un posible delito de homicidio involuntario.
Además, el consultorio médico en el que se llevó a cabo la intervención, dirigido por Lizarraga, que fue precintado por la policía, carecía de autorización vigente para operar, ya que la última le fue concedida en 2007 y por una duración de tan solo 5 años.
La víctima, de 46 años y originaria de Ecuador, murió el domingo en el servicio de urgencias del hospital Policlínico Umberto I de Roma, al que fue trasladada en parada cardiovascular en una ambulancia privada, horas después de la intervención.
La investigación también reveló que el médico peruano tiene antecedentes por lesiones relacionadas con intervenciones realizadas en 2006 y 2018 y que había sido denunciado por varias pacientes que se había sometido a una liposucción y otras cirugías estéticas.
El anestesista también tiene antecedentes, aunque no relacionados con su profesión.
Según las primeras reconstrucciones, los tres investigados habrían intentado reanimar a la mujer sin llamar a emergencias y finalmente contactaron con una ambulancia privada para trasladarla al hospital.
El médico peruano es un referente de la medicina estética para las mujeres de la comunidad sudamericana en Roma y anunciaba sus servicios en sus redes sociales en español con “los mejores precios del mercado italiano”.
Además, se describía como Cirujano Plástico y Reconstructivo y doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad Católica del Sacro Cuore de Roma y la Universidad Nacional Federico Villarreal de Perú.
Con la muerte de esta mujer ya son tres los casos de fallecimientos tras someterse a intervenciones de medicina estética en estudios privados en Roma en los últimos seis meses.